Investigadoras en Suecia, han encontrado que el ejercicio físico, es un buen remedio para las personas que sufren de ansiedad crónica.
Es sin duda una alternativa, frente a las terapias de conducta y la prescripción de medicamentos, que conllevan los conocidos efectos secundarios, señalan las autoras de la investigación, la profesora de Medicina, Maria Aberg y la estudiante de doctorado, Malin Henriksson, de la Universidad de Gothenburg.
Los beneficios quedaron demostrados en un trabajo con cerca de 300 pacientes, con una edad promedio de 39 años, de los cuales la mitad padecían ansiedad crónica, en su mayor parte mujeres, a lo largo de los últimos 10 años. Para el efecto guiaron los entrenamientos aeróbicos y de fuerza, durante 12 semanas, 3 veces por semana, en sesiones de una hora.
Quienes lo hicieron con más alta intensidad, mayor fue la mejoría en sus síntomas de ansiedad, explicaron. La nueva herramienta representa un tratamiento eficaz, que debería estar disponible en la atención primaria de salud, afirmaron.
Fuente: Universidad de Gothenburg
Tu Opinión es importante