Cuando los niños no están pegados al televisor, posiblemente están frente al computador o con sus tabletas, ya sea en sus casas o en la escuela, lo cual implica más tiempo inactivo físicamente.
El aprendizaje no siempre tiene que suceder en un escritorio, sostiene la profesora de Epidemiología de la actividad física, Valerie Carson, de la Universidad de Alberta. Con la pandemia, mucho tiempo de pantalla y comportamiento sedentario se han amplificado, anota.
Carson, ha trabajado en recomendaciones para “poner movimiento” al tiempo que permanecen en el aula o haciendo las tareas en casa. Las mismas hacen parte de un trabajo más amplio, con la participación de expertos internacionales, impulsado por el gobierno canadiense para aportar soluciones al problema del sedentarismo.
El paquete de sugerencias, están contenidas en una guía con las Pautas de Movimiento de 24 horas para niños y jóvenes, disponible en 14 idiomas.
No se trata de una herramienta exclusiva para las escuelas; es algo que padres, cuidadores, pediatras y legisladores, podrían usar, se sostiene.
Fuente: Universidad de Alberta
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