Los llamados químicos eternos, como los ( PFAS), que permanecen en el ambiente por siempre, especialmente en el agua, tienen un efecto nocivo contra la salud humana.
Así lo acaba de reiterar un grupo de 16 expertos, consultados por el Departamento de Salud de los Estados Unidos, entre ellos el profesor de la Universidad Estatal de Michigan, Kevin Elliott, cuyo trabajo se extendió por dos años.
La conclusión es la misma que en los últimos años han venido revelando científicos de distintas especialidades, vinculados a universidades y centros de investigación de Estados Unidos, Europa y China, entre otros. (Varios de los cuales hemos publicado en este sitio)
Dichos químicos, ( Per y poli fluoralquilatos) – que actúan como retardantes de llamas- han sido ampliamente utilizados en diferentes industrias, en el revestimiento de utensilios, ropa impermeable, empaques de alimentos, espumas contra incendios, tapetes, etc.
Sobre el nuevo informe, Elliott resalta aspectos como los siguientes: el poco conocimiento de los médicos sobre contaminación ambiental y sus efectos en la salud, al igual que su renuencia a practicar exámenes de sangre, que puedan ayudar a diagnosticar las enfermedades. Tales daños se refieren a la disminución de anticuerpos que debilitan el sistema inmune; niveles altos de colesterol; baja talla infantil y fetal; y el riesgo de cáncer de riñon, entre otros.
Fuente: Universidad Estatal de Michigan
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