Inspirados en antiguas técnicas de construcción, científicos establecidos en Suiza han creado planchas de concreto, que resisten hasta 4 toneladas de peso, sin necesidad de ningún refuerzo de hormigón.
Son, adicionalmente, 70 por ciento más livianas y tienen un espesor mucho menor, que las que se utilizan en la actualidad en la construcción de edificios, cuyo enorme peso exige grandes cantidades de hierro y acero en sus cimientos y estructuras.
Para el efecto, explica el profesor de Arquitectura de la Escuela Tecnológica (ETH) de Zurich, Phillippe Block, se inspiraron en los viejos principios de construcción de las catedrales góticas, cuyos techos de sostienen gracias a los entramados que distribuyen las cargas de forma asimétrica.
Las especificaciones logradas, con el nuevo tipo de losas, cumplen ampliamente los códigos de construcción exigidos en la regulación suiza, dijo Block. Se trata de ofrecer nuevas alternativas a los procesos de construcción sostenibles.
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