Científicos vinculados a universidades de Canadá y Europa, han anunciado que desistieron de su intento de aprovechar la tecnología de edición de genes, a fin de hacer más resistente el cultivo de la yuca, contra una de sus plagas más dañinas.
Mediante la técnica conocida como CRISP-Cas9, pretendían introducir un virus a la planta, para repeler el que provoca la enfermedad conocida como el mosaico de la yuca. Los resultados no fueron los esperados y, por el contrario, podrían agravar el problema, señalaron.
En ese sentido advirtieron a la comunidad científica que trabaja en sanidad vegetal, sobre la necesidad de tener mayor precaución, ante posibles resultados no deseados. El trabajo fue adelantado por un grupo de biólogos, vinculados a la Universidad de Alberta,entre ellos el estudiante de postdoctorado, Devang Mehta; de la la Universidad de Lieja, en Bélgica, y la Escuela Politécnica de Zurich.
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