Diseñar un calzado deportivo utilizando textiles tradicionales, fue la idea que impulsó al estudiante argentino, Fernando Rojo, de la Universidad de Pensilvania, para lanzarse a una nueva empresa.
Y en menos de dos años, lo ha logrado, asociándose con su compañero de estudios, J. Crew, y trabajando directamente con artesanos peruanos, que ahora producen novedosos zapatos, hechos a mano.
Lo que empezó como como una idea en borrador, después de visitar una feria artesanal en Buenos Aires, se ha convertido hoy en la empresa PATOS. Cada vez, el mercado se amplia y los artesanos obtienen una remuneración muy por encima del salario promedio en su país.
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