Equipados, con los mismos aparatos de las antenas urbanas, pero construidos con materiales mucho más livianos, los globos estan supliendo el servicio de Internet, a zonas bastante alejadas.
La tecnología – globos de “sobrepresión”- está siendo desplegada en sitios distantes como la Amazonia peruana y zonas poco pobladas de Kenia. El año pasado se colocaron 250 en la estratosfera, a unos 20 kilómetros de altura, donde soplan vientos de hasta 100 kilómetros de velocidad y las temperaturas rozan los 90 grados bajo cero.
El sistema implementado por la empresa Loon, una subsidiaria de Google, facilita la conectividad por largo tiempo, se puede reparar a control remoto, y también permite desinflar el globo para que aterrice en un lugar predeterminado, según se explica.
Puede tener usos de gran utilidad en los servicios de meteorología, mediante sensores que captan las ondas de gravedad o de flotabilidad, de acuerdo con el científico de Ciencias Atmosféricas de la Universidad de Stanford, Aditi Sheshadri.
Fuentes: Universidad de Stanford/ Loon
Tu Opinión es importante