Entre más de 45.000 variedades de arañas identificadas, algunas -que son eficientes tejedoras de hilos de seda- contienen pegantes que son claves tanto para la construcción de la red como para atrapar su comida.
Algunas de estas propiedades han sido estudiadas con mayor profundidad, en un trabajo liderado por la investigadora de Ciencias Biológicas de la Universidad de Maryland, Sarah Stellwagen.
Ella estima que dichos pegantes tienen un gran potencial en diferentes campos, por ejemplo en el control de plagas o en la fabricación de filtros lavables.
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