El litigio sobre la malversación de fondos de la campaña, cuando se destinaron US$1 millón para la fiesta de posesión, en el Hotel Internacional Trump, en Washington D.C, fue el más reciente escollo superado por el expresidente Trump, en los estrados judiciales.
Este caso se refiere -entre otras cosas-al pago de US$175.000 por el alquiler del salón de baile, por una noche, que se consideró exorbitante, pues el mismo día, en un evento similar, en un salón adjunto, se cancelaron solo US$5.000. A fin de resolver la situación, el Comité de Campaña y la Organización Trump, acordaron devolver US$750.000.
Lo anterior hace parte del seguimiento que realiza el centro “Just Security”, de la Universidad de New York, sobre temas de seguridad, democracia, derecho y política exterior.
En lo que respecta a los hechos que vinculan al expresidente, el seguimiento se remonta al 2006, un año después de que contrajera matrimonio, con su actual esposa Melania.
Entre los 14 pleitos pendientes, 5 tienen carácter penal y 9 civil. En el primer grupo, se enumeran las investigaciones relacionadas, con el pago a una actriz porno, el manejo de documentos secretos, la toma del Capitolio, la interferencia electoral en Georgia, y el manejo de impuestos del campo de golf en Westchester, Nueva York.
En el segundo grupo, se enumeran demandas por difamación y conducta sexual inapropiada, fraude y estafa familiar, denuncia de varios congresistas por alentar los disturbios del 6 de Enero, perjuicios a 12 policías heridos en el Capitolio, intento de rechazar el resultado electoral, impuestos de propiedades, y reclamos por perjuicios por parte de su anterior abogado Michael Cohen.
La firma de datos Statista, publica un resumen de dichos casos.
Fuente: Statista / Just Security, Universidad de New York
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