Un equipo interdisciplinario integrado por investigadores de varias universidades y el Servicio Nacional de Parques de los Estados Unidos, ha encontrado que escuchar los sonidos naturales, tienen sosprendentes beneficios para la salud humana: las personas experimentan menos dolor, menos estrés, mejor estado de ánimo y mejor rendimiento cognitivo.
El equipo dirigido por las profesoras Rachel Buxton, de la Universidad de Carleton (Canada, y Amber Pearson, de la Universidad Estatal de Michigan- entre otros-, realizaron un estudio que abarcó 251 sitios en 66 parques nacionales, en relación con la conservación del paisaje sonoro.
El trabajo está centralizado en el Departamento de Ecología de Luz y Sonido, de la Universidad Estatal de Colorado, del cual hacen parte el profesor George Wittemyer y el estudiante de doctorado, Jacob Job, quienes investigan sobre los sonidos profundos de la naturaleza.
Los sonidos del agua fueron los más efectivos para estimular las emociones positivas, en tanto que los sonidos de los pájaros, ayudan a combatir el estrés, explicaron.
De muchas maneras, la pandemia de Covid-19, ha enfatizado la importancia de la naturaleza para la salud humana, sostuvo Buxton. Hasta ahora las investigaciones sobre la influencia de los sonidos en la salud mental, se habían circunscrito a entornos hospitalarios y de laboratorio.
Fuente: Universidad Estatal de Colorado
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