Investigadores de Europa y Asia, han buscado la forma de aprovechar las plumas de gallina, de las cuales estiman que se incineran unas 40 millones de toneladas, anualmente, encontrando que pueden ser útiles en la fabricación de baterías.
Se trata de un material abundante en las plumas conocido como queratina, y que ha resultado eficaz como conductor y generador de energía. La investigación de varios años ha sido adelantada por el profesor de Alimentos y Materiales en la Escuela ETH de Zurich, Raffaele Mezzenga, quien a trabajado de la mano de científicos de la Universidad Tecnológica de Nanyang, en Singapur.
Dicho material se utiliza para fabricar las membranas que se usan en las baterías, y es tres veces más barato que los utilizados en la industria, además de ser una alternativa a la incineración de las plumas y su impacto ambiental, se indicó.
Fuente: Escuela ETH Zurich
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