En Estados Unidos, se han acumulado en los tribunales alrededor de 40.000 demandas, por el caso de los efectos potencialmente cancerígenos derivados del uso del talco de la firma Johnson&Johnson, clasificado por la agencia reguladora FDA, como un simple cosmético.
Después de la primera demanda, por un cáncer de ovario, entablada por una enfermera del Hospital de Sioux Falls, en Dakota del Sur, en el 2009, la empresa recurrió a una serie de maniobras, unas para evitar que se declarara el talco como cancerígeno, otras para impedir los juicios, y unas más con la promesa de autorregularse, hasta declararse en quiebra en el 2020.
La larga historia de maniobras, ha sido reconstruida por la periodista Casey Cep, vinculada al diario The New Yorker. Ella posee titulos de las universidades de Harvard y Oxford, y es autora de un reciente bestseller “Furius Hours: Murder, Fraud, and the Last Trial of Harper Lee”, donde narra las andanzas criminales de un Pastor acusado de asesinar a cinco miembros de su familia, para cobrar un seguro.
La enfermera del caso, Deane Berg, rechazó en su momento, una oferta de más de US$1 millón, para que retirara la demanda. Su delicado diagnóstico hace que sea incierto si estará viva para conocer el fallo final a cargo de una jueza de New Jersey, sede de la casa matriz de la firma farmacéutica.
La misma, indica la investigación de Cep, goza ahora de una nueva estructura legal. En una veloz maniobra simultanea, de apenas 72 horas, en Octubre pasado, creó en Texas una subsidiaria que se encargaría de enfrentar los juicios, y al mismo tiempo, una corporación limitada en Carolina del Norte, fórmula que podría darle tiempo para sortear el trámite de futuros casos en su contra. Entre tanto, la empresa, ya ha debido desembolsar, unos US$172 millones, consecuencia de demandas en tribunales de Missouri y otros estados. Y, se informa que ha reservado otros US$3.900 millones, para atender los juicios pendientes.
Al respecto, se ha pronunciado la profesora de Derecho de la Universidad de Cornell, Patricia Cook, quien afirma que ” existe la sensación de que esta bien experimentar con los cuerpos de las mujeres”, segun cita la autora de la investigación.
VER LAS HISTORIA COMPLETA: https://www.newyorker.com/magazine/2022/09/19/johnson-johnson-and-a-new-war-on-consumer-protection
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