Las experiencias, de asombro y admiración que brinda la naturaleza, constituyen una poderosa forma de terapia en personas que sufren estrés o han vivido algún trauma.
Así lo han probado investigadores de la Universidad de California en Berkeley, al tratar personas con problemas de salud, como es el caso de los veteranos de guerra.
Para el efecto realizaron excursiones que incluían la práctica del canotaje. Una semana después los síntomas de trastorno de estrés postraumatico (TEPT), se habían reducido significativamente, al tiempo que mejoraron sus relaciones sociales y su aprecio por la vida.
El investigador principal, con estudios de doctorado, Craig Anderson, reveló que mientras más temor sentían las personas en sus viajes en canoa, en aguas turbulentas, más felices y menos estresados estaban. Otras experiencias similares con alumnos universitarios y personas de zonas marginadas, mostraron resultados igualmente halagadores, se explicó.
Se calcula que un tercio de los veteranos de guerra de Estados Unidos, han sido diagnosticados con problemas de salud mental.
Fuente: Universidad de California, Berkeley
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