Las partículas de tinta y otros componentes que se utilizan en los tatuajes que se imprimen sobre la piel, terminan viajando por todo el cuerpo.
Así lo ha comprobado un grupo de científicos vinculados al Centro de Investigación Europeo de Rayos X -ESRF-, el Instituto Alemán de Evaluación de Riesgos, y el Instituto Alemán de Metrología.
En las técnicas del tatuaje se utilizan además de pigmentos orgánicos, otros elementos como el dióxido de titanio, níquel, el manganeso, el cromo, el cobalto, según explica Hiram Castillo, uno de los autores del estudio.
Hasta la fecha se sabía de los componentes químicos, pero no del comportamiento futuro de las nanopartículas, de las cuales se encontraron algunas que permanecen en los ganglios linfáticos, según el profesor Bernhard Hesse. Explicaron que se encontró una fuerte evidencia de la migración de elementos tóxicos a lo largo del cuerpo humano y del tiempo, más allá de la piel.
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