Miembros de un equipo internacional que busca a los violadores del Protocolo de Montreal, que prohibió una serie de productos químicos que dañan la capa de ozono, ha identificado dos regiones en China que han incrementado las emisiones de uno de ellos, conocido como CFC-11.
El compuesto químico, es utilizado en la fabricación de espumas aislantes para edificios y aires acondicionados. Para su investigación, los expertos han estructurado una red de colaboración conocida como AGAGE. Parte del equipo esta concentrado en la Universidad de California en San Diego. En el hallazgo reciente, ha trabajado -entre otros- el profesor de Geoquímica, Ray Weiss y el profesor invitado de la Universidad Kyungpook de Corea del Sur, Sunyoung Park.
Otras fuente de contaminación con dicho producto, podrían estar localizadas en Suramérica, señalaron.
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