Decenas de libros han sido retirados de las bibliotecas públicas, en seis Estados de los Estados Unidos, -todos ellos gobernados por mayorías republicanas-, por contener información sobre sexo, género, discriminación racial y esclavitud.
En el caso más reciente, en Iowa, de una lista sospechosa de 400 títulos, 60 salieron de las estanterías. Así lo revela el escritor del diario The New York, Fabio Bertoni, al señalar que paradójicamente en dicho Estado- donde es legal el sexo para jóvenes de 16 años-, ahora no puedan instruirse sobre el tema. En la nueva corriente de la censura escolar, figuran los estados de Texas, Florida, Missouri, Utah, Arkansas y Carolina del Sur.
Ante las acciones de censura, promovidas por Juntas Escolares y gobernadores, los propios alumnos y librerías particulares, estan promoviendo la creación de clubes de lectura, para abordar los temas prohibidos en las aulas escolares. En Miami, una librería ha pintado su fachada con los nombres de los libros censurados, en muchos casos clásicos de la literatura.
Padres de familias, más abiertos al conocimiento, han salido a las calles a protestar, al igual que los bibliotecólogos, casas editoriales y escritores, confundidos ante las sanciones (hasta un año de cárcel) que pueden acarrear por adquirir y colocar libros para uso público, que algún funcionario pueda considerar no apto para la juventud.
Fuente: The New Yorker/ Distritos Escolares/ Asociación Estadounidense de Libreros
Tu Opinión es importante